El supuesto experimento con Ivermectina o la construcción de una noticia falsa con propósitos políticos 

Hernán Gómez Bruera

 

El 1 de febrero se publicó una nota en Animal Político donde se señalaba que entre el 2020 y el 2021, el gobierno de la Ciudad de México había comprado 293 mil cajas de Ivermectina (un medicamento antiparasitario), las cuales se compraron y repartieron entre la población a través de los Kits Covid. 

La noticia afirmaba que el gobierno capitalino trató de defender la efectividad de esta medida con un paper que publicó en el repositorio académico SocArXiv la Agencia Digital de Innovación Pública, dependencia a cargo de José Merino. 

El asunto provocó una oleada de críticas en redes sociales que, como ya es costumbre, empezaron a distorsionar cada vez más el mensaje original hasta configurar una noticia completamente falsa que no ha dejado de circular en los medios.  

Salomón Chertorivski (https://bit.ly/3gCxqCo) afirmó, por ejemplo, que se trató de un experimento en el que los capitalinos fuéramos conejillos de indias. El caricaturista Paco Calderón se sumó a la distorsión al publicar su cartón (https://bit.ly/3Gzwqtl), donde dibuja a José Merino leyendo un libro del Dr. Mengele, ese siniestro médico nazi que  experimentaba con humanos y que, por ejemplo, inyectó a judíos con enfermedades mortales, e incluso cosió a dos gemelos de la espalda para ver si podían sobrevivir y formar un siamés… esto sólo para que vean hasta qué nivel llegaron las cosas. 

 

Aunque el extremo de ridículo se lo llevó la diputada del PAN, América Rangel (https://bit.ly/3gz3188), quien sin ningún tipo de pudor o sentido común comparó también esto con el Experimento Tuskegee en Estados Unidos, el caso en el que inyectaron sífilis a población afrodescendiente para ver cómo evolucionaba naturalmente la enfermedad.

Todos estos casos ejemplifican claramente la manera en que se construye una noticia falsa, porque eso es todo este episodio de la Ivermectina: una fake news que toma ciertos elementos reales y verdaderos asociándolos de tal manera que crea una percepción falsa. Les explico porqué.

En primer lugar, es falso que se haya tratado de un “experimento”, como dicen los críticos. No hubo ningún experimento con Ivermectina. Lo que hubo, como las autoridades han tratado de explicar repetidamente, fue una evaluación de una política pública que se hizo después de haber empleado la Ivermectina, y sólo después se publicó un artículo mostrando los resultados. 

Tal vez les cueste a algunos entenderlo pero no es lo mismo una intervención de política pública que un experimento, son dos cosas completamente distintas. No se puede comparar manzanas con día jueves. 

Si hubiese sido un experimento tendrían que haber recurrido a una metodología totalmente distinta a la que se empleó. Por ejemplo, teniendo un control más adecuado de la muestra, contar un grupo de control al que se le suministra un placebo, y monitorear con más cuidado a quienes se les administrara el medicamento. 

Además, hay que recordar que cuando se llevó a cabo esa política de distribución de Ivermectina en la ciudad había varios estudios que argumentaban que podía ser benéfico su uso en etapas tempranas del Covid. Para entonces había investigaciones alrededor del mundo que sugerían que podía ser útil para tratar el Covid 19, como lo sugerían experiencias en Perú, Brasil, Italia, India, España, República Dominicana y Pakistán. 

Parece ilógico, además, que se pretenda responsabilizar a  José Merino, y a la Agencia Digital de Innovación Pública, de ser uno de los artífices de esto, cuando ellos no fueron los que implementaron la política pública, sino que simplemente la evaluaron después de llevarse  a cabo. 

En otras palabras: lo único que hizo este funcionario de la Agencia Digital, que hoy quieren quemar en leña verde, fue hacer un estudio estadístico en el que se evaluaba una política pública, según la cual se comprobaba que aquellos enfermos de Covid 19 que recibieron el kit médico con Ivermectina tenían 68% menos de probabilidad de desarrollar síntomas que requieran hospitalización.  

Pero hay que decirlo claramente: en el fondo, lo que esta fake news busca hacer no es golpear al director de la Agencia Digital de Innovación pública, sino al gobierno de Claudia Sheinbaum. Porque este capítulo de la Ivermectina parece ser un episodio más de golpeteo político, donde no solamente está involucrada la oposición, sino también varios medios y columnistas que parecen estar siendo alentados por cierto fuego amigo (Saludos, Marcelo; saludos, Ricardo).  

Lo que se quiere es desacreditar a Sheinbaum y a su gobierno de cara a la sucesión presidencial. Y no es casual que busquen hacerlo  precisamente en una de las áreas donde es más claro éxito de su gobierno que es en el manejo de la pandemia, donde sabemos que el manejo de esta ha sido mejor que en otras entidades del país, e incluso mejor que a nivel federal.